Javier Zalba es un saxofonista, clarinetista y flautista cubano, uno de esos músicos que parecen no tener fronteras en su quehacer artístico. Su dominio de la familia de los saxofones, el clarinete y las flautas le ha permitido transitar con naturalidad entre lo clásico, lo popular, lo tradicional y lo contemporáneo, consolidándose también como un intérprete de jazz de gran reconocimiento. Su versatilidad técnica y expresiva lo ha llevado a explorar un universo sonoro que va desde los conciertos de Mozart y Bach hasta las descargas más intensas del jazz cubano.
Graduado en 1976 de la Escuela Nacional de Arte en la especialidad de clarinete, amplió luego sus estudios en flauta en la Escuela de Superación Profesional Ignacio Cervantes, de donde egresó en 1984. Sus primeros pasos estuvieron ligados a la música de cámara, pero pronto su oído y su espíritu inquieto lo acercaron al jazz y a la riqueza rítmica de la música popular cubana, fuente de inspiración que lo ha acompañado siempre.
Con apenas 23 años, su ingreso en 1978 a la legendaria Orquesta Cubana de Música Moderna le abrió un camino de colaboraciones y escenarios que marcarían su carrera. Desde entonces, ha desplegado su virtuosismo con el saxofón barítono, tenor, alto, soprano, el clarinete y la flauta, en un recorrido que lo ha llevado a fusionar estilos y a dialogar con públicos diversos dentro y fuera de Cuba. Sus interpretaciones han quedado registradas tanto en homenajes al pianista cubano Emiliano Salvador y al saxofonista norteamericano Dexter Gordon como en estrenos de obras cubanas contemporáneas, entre ellas la Sweet Cecimar de Jorge López Marín.

Su trayectoria está marcada por la pertenencia a agrupaciones fundamentales de la música cubana: Orquesta Cubana de Música Moderna, grupo de Felipe Dulzaides, conjunto de José María Vitier, Irakere, Afrojazz de Bobby Carcassés, la Orquesta del Cabaret Tropicana, el grupo ORU de Sergio Vitier, además de su participación en el Buena Vista Social Club y en las orquestas de Ibrahim Ferrer y Rubén González. Junto al pianista Roberto Fonseca fundó el grupo Temperamento, con el que mantuvo una presencia estable en la escena del jazz cubano.
Zalba ha compartido escenario con figuras internacionales y ha dejado huella en importantes festivales como el North Sea Jazz, San Sebastián, Roma, Cerdeña, Estocolmo, Antibes, así como en clubes emblemáticos como el New Morning en París, Ronnie Scott’s en Londres, Cuasimodo en Berlín y Juan Sebastián Bar en Caracas. Su vínculo con la escena internacional se extendió también a giras con Cubanismo, el proyecto del trompetista Jesús Alemany.
La docencia ha sido otra vertiente esencial de su labor. Ha enseñado en el Conservatorio Amadeo Roldán y en el Instituto Superior de Arte de Cuba (hoy Universidad de las Artes), y ha impartido clases magistrales en países como Colombia, Dinamarca, España, Inglaterra y Suiza. Su influencia formativa ha dejado huella en varias generaciones de jóvenes instrumentistas cubanos.
En la discografía destaca el álbum Bariton-chá galardonado con el Premio Cubadisco en la categoría de Música Instrumental y que refleja la búsqueda constante de Zalba de nuevas sonoridades y su capacidad para combinar el rigor académico con la espontaneidad de la improvisación. En 2012 Javier Zalba fundó el cuarteto Zsaxos, una agrupación de referencia creada para otorgarle al saxofón el mérito que le corresponde como instrumento imprescindible en el jazz.
Más que un instrumentista virtuoso, Javier Zalba es un músico integral, un explorador de timbres y estilos, un puente entre la tradición y la modernidad. Su mérito mayor no ha sido darse a conocer, sino ser descubierto desde hace décadas como uno de los intérpretes más sólidos y versátiles de la música cubana, capaz de conmover tanto en una sala de conciertos como en un club de jazz, dejando siempre la huella de su inconfundible sonido.
Discografía
- Zsaxos de Zsaxos Quartet / 2020.
- Bariton-chá / 2007.
- Homenaje / 1995.