Antonio Arcaño: El monarca del danzón, es considerado uno de los flautistas más influyentes de Cuba. Fue el director y fundador de la orquesta danzonera, Arcaño y sus maravillas.
Arcaño inicia sus estudios musicales con Armando Romeu, en la flauta sería guiado por el maestro Antonio Díaz Betancourt. Su primera actuación se registra en el cabaret La Bombilla. Su contacto con el también flautista Francisco Delabart (Panchito Flauta Mágica) fue decisivo para el posterior desarrollo de Arcaño como músico danzonero.
Antonio Arcaño fue flautista de la orquesta del pianista y compositor Armando Valdespí, en la década del 30 pasaría a la orquesta Gris, de Armando Valdés Torres. Integró también la orquesta Maravilla del Siglo como director musical.
En 1937 funda su propia orquesta, Arcaño y sus maravillas que con su nuevo ritmo toca los danzones solamente instrumentales, eliminando a los cantantes. Sus compositores principales fueron Israel López (Cachao), Orestes López, Antonio Sánchez Reyes (Musiquita), Enrique Jorrín, Félix Reyna, José Esteban Urfé, Miguel Tachit y Dora Herrera.
En esta orquesta cada músico se destacaba por su virtuosismo logrando un ensemble poco común en la época. Como ellos mismos decían: un as en cada instrumento, una maravilla en su conjunto. La introducción, por primera vez, de la tumbadora en la orquesta completó la base rítmica que demandaba este danzón de nuevo ritmo.
Con la línea musical inaugurada por Antonio Arcaño y sus Maravillas, entran en el medio sonoro de Cuba factores rítmicos, melódicos y armónicos que determinarían el cauce posterior del danzón. En el danzón de Arcaño se introducen fragmentos sinfónicos y elementos del jazz que enriquecen el género, que armónicamente, en su complejidad y atrevimiento sorprenden todavía.
A su retiro de la vida artística Antonio Arcaño se dedicaría a dar clases de música y formar nuevos intérpretes del danzón.
Está en Amazon
- El Melao
- Danzón Mambo
- Orquesta Arcaño Y Sus Maravillas
- Colección Agrupaciones Bailables: Arcaño Y Sus Maravillas
colaboración pagada