Alejo Carpentier es considerado uno de los escritores fundamentales del siglo XX en lengua española, uno de los artífices de la renovación literaria latinoamericana y figura destacada de las letras hispanoamericanas por sus obras barrocas como El siglo de las luces y El reino de este mundo (basado en su experiencia de viaje a Haití). Carpentier definiría su método artístico como lo real maravilloso americano.
Durante mucho tiempo se creyó que había nacido en La Habana. Posteriormente se ha documentado su partida de nacimiento en Suiza. Sea como fuere la familia Carpentier se instala en La Habana entre 1908 o 1909, poco después de su nacimiento.
Alejo Carpentier se formó en escuelas de Francia, Austria, Bélgica y Rusia, recibiría una esmerada educación que combinó una formación bilingüe (español y francés), la pasión por la lectura y una gran vocación musical.
Sus primeros estudios de música los iniciaría con sus padres por lo que a temprana edad adquirió el dominio del piano, posteriormente viajaría a París donde ampliaría estos estudios musicales. En 1921 inicia estudios de arquitectura aunque los abandona poco después para dedicarse a la literatura.
Para 1924 ya había ganado prestigio como crítico musical y colaboraba en revistas culturales y en la organización de conciertos junto a compositores como Amadeo Roldán. En 1928 viaja a París y es nombrado director de programas musicales de la radiodifusión francesa. Entre 1935 y 1939 dirige los estudios de grabación parisinos Foniric.
Entre 1939 y 1963 pasaría por Cuba y Venezuela impartiendo varias conferencias, cursos y organizando festivales de música. De regreso a Cuba en 1963 organiza el Segundo Festival de Música Popular Cubana. Alejo Carpentier fue colaborador de los periódicos La Discusión, El Heraldo, Tiempo Nuevo, Información, El País y Granma y de las revistas Carteles, Social, Conservatorio, Bohemia, entre otras.
En 1977 recibe el importante Premio Miguel de Cervantes, lo que le convertiría en el segundo autor en recibir este premio creado en 1976. El Cervantes es considerado el máximo reconocimiento a la labor creadora de escritores hispanoamericanos cuya obra haya contribuido a enriquecer de forma notable el patrimonio literario en lengua española.
En su trabajo musicológico Carpentier analiza la música popular cubana y su relación con el surgimiento de lo auténticamente nacional, su riqueza de ritmos, de frases y tonalidades. Estas ideas darán origen a su importante obra La música en Cuba de 1946.
A partir de 1968 pasaría sus últimos años en Francia, como alto representante diplomático de la República de Cuba, en la embajada de París.
Obras
- La hija del ogro, música de Amadeo Roldán / 1927.
- Dos poemas afrocubanos, Mari-Sabel y Juego Santo, para voz y piano, música de Alejandro García Caturla / 1927.
- Yamba-Ó, tragedia burlesca / 1928.
- La rebambaramba, ballet, con música de Amadeo Roldán / 1928.
- Poèmes des Antilles, nueve canciones / 1929.
- Manita en el suelo, ópera bufa, con música de Alejandro García Caturla / 1930.
- La Passion Noire, cantata para diez solistas, coro mixto y altoparlantes / 1932.