Antonio Figueroa Jiménez fue un violinista santiaguero. Comenzó estudios de flauta en 1860, con su padre, Manuel Figueroa, para luego estudiar flautín. También con su padre inició su formación como violinista. Antonio Figueroa Jiménez es hermano del también violinista Ramón Figueroa Morales.
El 14 de julio de 1867 se presentó con orquesta acompañante, como ejecutante de la flauta en el teatro Dolores de Santiago de Cuba, el 21 de julio actúa nuevamente, como intérprete del violín, ocasión en que ejecuta obra del violinista y compositor belga Charles Auguste de Beriot, con acompañamiento de piano.
Por sus facultades como músico fue nombrado violinista principal de la Capilla de Música de la Catedral de Santiago de Cuba, dirigida por el español Antonio Gustavino. Igualmente fue maestro del Seminario de San Basilio el Magno.
En 1872 instrumentó los dos primeros actos de la zarzuela El rey que rabió, dirigida por José Martín Varona. En el mismo año viajó a París para completar su formación musical junto a José White y el francés Delphin Alard. En 1878 regresa a Cuba para luego residir por varios años en México.
Antonio Figueroa Jiménez junto a Ramón Figueroa Morales, Manuel Muñoz Cedeño, José Domingo Bousquet, Carlos Anckermann, Juan Torroella, Casimiro Zertucha, Joaquín Molina, Marta de la Torre, Catalino Arjona y Diego Bonilla integran la lista de violinistas clásicos cubanos que se destacaron entre la segunda mitad del siglo XIX y la primera del siglo XX.
Obras
- Danza, para violín y piano.
- Gaviota, para violín y piano.
Familiares músicos
- Ramón Figueroa Morales, violinista, compositor, pedagogo.