Aniceto Díaz, El rey del danzonete. Le corresponden dos significativos honores, dotar de voz al danzón, y vincular a los dos ritmos bailables más significativos de la música, el son y el danzón, en una nueva forma rítmica conocida como danzonete.
Estudió solfeo y teoría de la música con Justo Carrillo Díaz, figle (instrumento musical de viento, de sonoridad grave, con forma larga y estrecha, formado por un tubo cónico de metal y provisto de un número variable de orificios y llaves) con Eduardo Betancourt; piano con Amadeo Lasanta y flauta con Arcadio Iribe Andudi.
Integró como ejecutante del figle, la orquesta de Miguel Failde Pérez, después fue flautista de las orquestas de Ramoncito Prendes y la de Amadeo Lasanta. En 1914 fundó su propia orquesta, que ejecutó su primer baile en mayo del mismo año.
Su primer éxito como compositor lo obtuvo en 1919 con el danzón El teléfono de larga distancia: la temática bien estructurada dentro del complejo instrumental, refleja la atmosfera de la llamada a larga distancia. Se establece un diálogo con el instrumento solista, que se ha situado a cierta distancia del resto de la familia instrumental. Ésta responde al llamado del solista (que puede ser una flauta o una trompeta con sordina, según el tipo de orquesta). El complemento de ese pasaje musical lo constituye el efecto sonoro dimanante de un reloj despertador hecho sonar en el momento indicado.
Hacia 1929 el danzón estaba en crisis por el auge de la música norteamericana y del son y Aniceto Díaz se plantea crear un nuevo género musical: el danzonete. Partiendo del danzón el compositor agregó las innovaciones que había introducido el son en la música bailable de Cuba, así como un cantante, a la vez que eliminaba el cinquillo.
El primer danzonete que compuso Aniceto fue Rompiendo la rutina, estrenado el 8 de junio de 1929 en los salones del Casino Español de Matanzas. El 24 de noviembre del mismo año, esta orquesta actuó en la inauguración de la primera radioemisora de Matanzas, y entre 1931 y 1932, se presentó en La Habana por la radio y en teatros, y grabó para el sello discográfico Brunswick.
En 1944 Aniceto se instala definitivamente en La Habana, donde organizó una nueva orquesta con sus hijos Aniceto, Justo, Silvio y Osvaldo, además de otros músicos de la capital. Esta orquesta dejó de actuar en 1947 y su director-fundador se dedicó solo a la composición., la enseñanza y la afinación de pianos.
Obras
- Canción: Coralito, texto: E. Pizzi de Porras.
- Chachachá: La leyenda de un hueso.
- Danzón: A la voz de fuego, Aceléreme la maquina, chofer, Al compás de los timbales, Alma y vida, Aramís, Asociación de la prensa, Arroyo Arenas, Borneo, Británico, Candela viva, Cando de sueño, Cotorrita, Cubalibre, El agua del Pompón, El teléfono de larga distancia, Hershey, La divina Caridad, entre otros.
- Danzonete: La mujer mariposa / 1927, Moralidad y Rompiendo la rutina / 1929, El trigémino, Son igual que el cocodrilo y La dulce imagen / 1930, Así es la vida, Capricho español, El diablo tun tun, Guajirita mía, La costilla, entre otros.
- Pasodoble: Almería, Club asturiano, Don Pedro, Hispano cubano, La alegria del baile, Malvaloca, Primavera, Sevilla, Madrid.
- Otros géneros: Matanzas Sportling Club, texto: Pastor Morejón, y One step.
